El incompetente Martínez Neri

El incompetente Martínez Neri/Columna/Tinta de Quintero 

Cómplices en la impunidad 

La primavera oaxaqueña  

Edil capitalino.

Antonio Quintero

 

A menos de un año de su gobierno, Martínez Neri no ha dado resultados positivos a los ciudadanos de la capital oaxaqueña, les ha fallado por completo, las promesas de campaña se transformaron en grandes mentiras, promesas de campaña se volvieron pesadilla en la realidad cotidiana de un edil que ha estado siempre ausente de los mismos problemas de su administración, es el último que siempre se da cuenta de todo lo que pasa a su interior. 

Martínez Neri no pudo con el paquete para gobernar la capital oaxaqueña, le quedó muy grande el saco, los problemas cotidianos en la capital se han agudizado en la inseguridad, robos, asaltos, a plena luz del día. 

En calles del centro histórico en la noche, lucen a oscuras, no hay iluminación, mismas que han servido para delinquir a bandas de criminales con total impunidad. 

La ciudad es un asco, pues el problema de la basura no lo ha podido resolver, se han estado gastando millones de pesos para trasladar la basura a quien sabe dónde, solo él lo sabe y sus compinches, asesores que se han convertido en cómplices en un marco de impunidad. 

De manera perversa como es su costumbre, junto con su operador político secretario de gobierno y suplente Felipe Canseco enviaron las miles de toneladas de basura al famoso y conocido lugar “el playón”, a las riberas del Río Atoyac, sin importarles el crimen ambiental que se estaba cometiendo y hoy no hay responsables ni culpables del reciente incendio que se originó recientemente, de manera alevosa, ventajosa, y en complicidad con las mismas autoridades municipales, ocasionando todavía más una gravísima contaminación en toda esa zona, donde además se ubica la Central de Abastos. Es decir, en el propio centro de la capital oaxaqueña.

 

Los bomberos hicieron una tarea titánica de apagar el fuego que consumía las miles de toneladas que se encuentran ahí desde hace meses y que ante la incapacidad del propio presidente municipal Martínez Neri, de resolver un relleno sanitario ejemplar ha preferido seguir abonando y almacenando la basura en un lugar que no es apropiado para ello, y cometiendo un grave delito ambiental. Almacenando la basura a orillas del Río Atoyac. 

¿Porque los funcionarios responsables de las áreas de ecología, Semarnat, Profepa, y de la procuración ambiental y Semaedeso, se han quedado calladas? 

El crimen ambiental continúa lacerando a la población oaxaqueña, a propios y a extraños, a turistas nacionales y extranjeros, a todos por igual, sin que resuelvan el terrible, angustioso y aterrador problema de la basura, todo esto habla de una reprobable inacción y la deplorable conducta de funcionarios ante estos lamentables hechos. 

Pero esto no es lo único, la administración de Martínez Neri está consumando acciones a espaldas del pueblo, de los ciudadanos, poco a poco han estado saliendo las denuncias, las acciones ilícitas que están realizando muchos funcionarios con la anuencia de sus propios jefes, de los mismos operadores políticos de Martínez Neri, -que casualidad que nadie se había atrevido a denunciar nada hasta que la propia sindica municipal hacendaria de nombre Nancy Mota Figueroa, hiciera la respectiva denuncia ante la fiscalía por el robo de automóviles del corralón denominado “primavera”-.

 

Como siempre Martínez Neri se dio cuenta cuando ya todo el mundo sabía del robo descarado en su administración, 850 automóviles básicamente entre otras cosas fueron “vendidas o intercambiadas” con los respectivos permisos de los jefes.  

Esto habla de una podrida y … ¿corrupta administración municipal?

A un año de gobierno de Francisco Martínez Neri, el catedrático del porrismo, y sus secuaces operadores políticos expresidiarios que trabajan y están a sus órdenes. 

Definitivamente es reprobable su omisión y deben ser sancionados, castigados ante tantas anomalías e irregularidades en su administración municipal pero que además ha estado engañando a todos los ciudadanos de la capital oaxaqueña, y sus agencias se encuentran olvidadas. 

De ser una ciudad educadora es una ciudad aterradora, un total fracaso e impunidad.  

En el aspecto financiero, es un caos, no hay dinero para pagarles a los pensionados y jubilados de los sindicatos del ayuntamiento, pues desde hace varios años todos los presidentes municipales se aprovecharon y tomaron como suyo el dinero de ellos. 

Hoy no tienen para pagar, Martínez Neri los ha estado pagando en abonos o con mentiras, pero los sueldos de sus funcionarios llegan muy puntuales, funcionarios parásitos que no hacen absolutamente nada y tienen sueldo. 

Neri es errático en todo lo que hace, los malos hábitos de su porrismo le han hecho daño, pero no a él, -el ya no cambia-, le ha hecho daño grave a la administración municipal, está gobernando con porros salidos de movimientos guerrilleros, con orígenes oscuros. 

De los malos funcionarios que dice que renunciaron, fueron seis, pero obviamente son los chivos expiatorios, porque es tan obvio que recibieron órdenes desde arriba... 

Por todo esto ya no es sana su administración municipal, debió renunciar cuando Oswaldo García Jarquín lo presionó y acomodó de nuevo a sus regidores por tres años más, estos funcionarios le deben más a García Jarquín que al propio Martínez Neri, su administración se pudrió fácilmente, porque reza un refrán popular; una manzana podrida echa a perder las demás... 

Nos queda esperar otro capítulo de su pésima novela, que por desgracia tendrá su efecto e impacto en la sociedad oaxaqueña en los servicios que dice pagar pero que en la realidad no los paga, pero es engañada, porque la ciudad no tiene servicios ni de calidad ni de ciudad... 

¡¡Nos leemos en nuestra próxima entrega!!